Cifras

Gráficos consumo de café en Aragón

El 85% de los aragoneses comienza el día con una taza de café. El café se asocia con el momento de despertarse por las mañanas e incluso el 55% de los encuestados reconoce que “no es persona” hasta que no se la toma. De hecho, el café del desayuno es al que más costaría renunciar a los aragoneses, según sostiene el 51% de los encuestados. Tras el desayuno, la sobremesa es el segundo momento del día preferido por los aragoneses para degustar un café. Concretamente, el 56% toma café después de comer.

La media nacional de consumo de café está entre una y tres tazas al día. En el caso de Aragón, el 36% de los encuestados toma entre una y dos y otro 36% entre dos y tres, sin diferencias significativas por sexo. La franja de edad en la que se registra un mayor consumo de café en la región está entre los 45 y los 55 años. El 100% de los aragoneses de esta edad consume café habitualmente y el 62% toma más de dos tazas diarias (el 31% entre 2 y 3 cafés, el 23% entre 3 y 4 y otro 8%, más de 4).

Pero, ¿cómo les gusta a los aragoneses el café? En el desayuno, la mayoría (el 61% de las mujeres y el 55% de los hombres) lo prefiere con leche, pero los gustos son diversos y en la sobremesa se abre el abanico de opciones. El 30% de las mujeres lo prefiere solo, frente al 29% que lo toma cortado y el 18% que lo toma solo con hielo. La mayoría de los hombres se decanta por el cortado (el 34%, frente al 33% que lo toma solo y el 18,5% que lo toma solo con hielo). Eso sí, entre dulce o amargo los aragoneses lo tienen claro y la inmensa mayoría toman el café edulcorado con azúcar (67%) o sacarina (24%).

Y, ¿en casa o en el bar? El 60% de los aragoneses toma café indistintamente en casa o en el bar, mientras que el 18% sólo lo toma en casa y el 22% solo lo toma en el bar. Los hombres (el 31% de los hombres) prefiere tomar café en el bar, frente al 13% de mujeres y los adultos de 46 a 55 años son los que más cafés toman en el bar.

A la hora de prepararlo en casa, las cafeteras más habitualmente utilizadas son las expreso (el 43% de los encuestados optan por esta forma de preparación) y las de filtro (utilizada por el 22%), aunque un significativo 17% ya prefiere las monodosis.

La edad de inicio de consumo de café de la mayoría de los aragoneses se remonta a la etapa universitaria o la infancia. El 28% de los encuestados comenzó a tomar café en la Universidad y otro 28% toma café desde que era niño. Por sexo, hay más hombres que se iniciaron en el consumo de café de niños que mujeres (el 36% de los hombres, frente al 18% de mujeres). Los hombres también comenzaron a tomar café antes en la universidad (el 31%, frente al 25% de las mujeres).

Una bebida social.
La encuesta ha puesto de manifiesto el carácter socializador del café. Los aragoneses asocian una taza de café a momentos de tertulia, como la sobremesa (el 92% de los encuestados) o una charla entre amigos (el 75%). El 69% de los aragoneses no concibe una buena sobremesa sin una taza de café.

Además, el 88% de los hombres y el 87% de las mujeres reconocen que utiliza la expresión “quedar para tomar un café” independientemente de que luego pidan esta bebida o no, sobre todo entre los 46 y los 55 años.

Café y estado de alerta.
Los efectos estimulantes del café son bien conocidos por la mayoría de los encuestados. El 81% reconoce como cierta la afirmación de que el café mejora el estado de alerta y la capacidad de concentración y, de hecho, además de lo placentero de su aroma y su sabor, entre las razones de consumo los entrevistados señalan que el café les ayuda a despertarse por las mañanas (36%) y a concentrarse y mejorar su rendimiento intelectual (28%).

La mayoría de los consumidores ven en el café un aliado que les ayuda a desempeñar mejor tareas del día a día, como estudiar, conducir o trabajar: 3 de cada 10 encuestados sostiene que no puede comenzar a estudiar sin una taza de café en la mesa; 7 de cada 10 afirman que, cuando conducen, el café les ayuda a mantenerse alerta y a estar más atentos a la carretera; y 6 de cada 10 reconocen que, en el trabajo, cuando tienen que concentrarse, el café les ayuda a rendir mejor.

Café y salud.
La mayoría de los aragoneses saben que el consumo de café tiene efectos sobre la salud. Sin embargo, el estudio revela un desconocimiento generalizado de los efectos concretos que el café puede tener en el organismo. A nivel popular se conoce su capacidad antioxidante -el 64% de los encuestados sabe que el café es una fuente importante de antioxidantes en la dieta diaria-, pero pocos son los que saben que el café puede desempeñar un papel protector frente al riesgo de desarrollar varias enfermedades. La mayoría de los encuestados desconoce que, según las evidencias científicas más recientes, el consumo moderado de café se asocia inversamente con el riesgo de padecer Parkinson y Alzheimer (conocido por el 33% de los encuestados), algunos tipos de cáncer (conocido por el 30%) o la diabetes (sólo conocida por el 27%). “Son varios los compuestos del café que presumiblemente tienen efectos beneficiosos en la salud, pero el más estudiado hasta la fecha es la cafeína, considerada como la mayor responsable de la neuroprotección asociada a su consumo regular”, señala Rafael Franco, Catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad de Barcelona y portavoz científico del Centro de Información Café y Salud.

Por otro lado, y contrariamente a la creencia más extendida entre la población, las evidencias científicas disponibles señalan que el consumo de café es un hábito cardiosaludable. La mayoría de estudios prospectivos y ensayos clínicos realizados hasta el momento no observaron una asociación entre consumo moderado de café y enfermedad coronaria ni mayor riesgo de hipertensión arterial. Sin embargo, 5 de cada 10 encuestados desconocen esta conclusión.

Tags: , ,