Conclusiones

Los efectos beneficiosos del café (con cafeína) sobre el rendimiento mental son de sobra conocidos y han sido recientemente confirmados por la EFSA, que ha afirmado la existencia de una relación causa efecto entre el consumo de 75mg de cafeína (aproximadamente una taza de café) y un aumento en los niveles de atención (concentración) y alerta, principalmente en situaciones de baja activación.

La cafeína también puede mejorar la seguridad y eficacia en la realización de trabajos nocturnos y en la conducción por la noche.

También se han documentado efectos positivos sobre el humor y el tiempo de reacción.

Además, la tecnología de mapeado cerebral sugiere que los efectos fisiológicos de la cafeína no provocan ni dependencia ni síntomas significativos de síndrome de abstinencia.

Existe una relación entre ingesta diaria de cafeína, problemas de sueño y somnolencia diurna; sin embargo, dichos efectos dependen de la cantidad de cafeína ingerida durante todo el día y también se ven influidos por el perfil genético de cada individuo. Aquellas personas que tengan problemas de sueño tras consumir café normal pueden elegir, o se les puede aconsejar, sustituir dicho café por café descafeinado en la tarde y la noche.