Vitamina B2

La Vitamina B2 o riboflavina 7,8-dimetil-10-(1’-ribitil)isoaloxazina también se había denominado Vitamina G. Es soluble en agua y por lo tanto su exceso se elimina por la orina. No se almacena en el organismo por lo que se ha de ingerir de manera continua. Su excreción depende de las necesidades del organismo, a más necesidades menor excreción y viceversa.

Es esencial para la síntesis de los flavoenzimas: flavin-adenin mononucleótido (FMN) y flavín-adenin dinucleótido (FAD) cuya función es participar en las reacciones de transferencia de electrones (respiración celular) y en reacciones reductoras en la síntesis de diferentes compuestos (.: ácidos grasos). La Vitamina B2 es necesaria para mantener en buenas condiciones las mucosidades del tracto digestivo, una buena oxigenación de la córnea y también es necesaria para absorber el hierro.

Dosis diaria recomendada

La dosis recomendada está entre 1.1 y 1.5 mg en los adultos. Para una mejor biodisponibilidad es conveniente ingerirla acompañada de Vitamina C y de otros miembros de complejo B, sobre todo de la Vitamina B6.

Aunque todos los alimentos tienen riboflavina muchos de ellos la tienen en cantidades relativamente pequeñas. Los alimentos ricos en riboflavina son algunos vegetales verdes, frutos como la uva, la papaya y los albaricoques, y los derivados animales como el hígado, los huevos y la leche. Otras fuentes conocidas de riboflavina son las almendras, las avellanas, los pistachos y las semillas de mostaza.

La carencia de Vitamina B2 se pone de manifiesto por inflamaciones en la boca y en la lengua, cortes en los extremos de la boca y el ojo, lesiones de la piel (.: “cara seca”) mareos y vértigo, pérdida del cabello, respuesta mental retardada y cansancio general.

Efectos beneficiosos

Un estudio realizado en 1992 en China (reportado por la WFP; Programa de Alimentación de Naciones Unidas) indica que el consumo de riboflavina es menor (0.8 mg) que la cantidad recomendada, siendo menor en áreas rurales (0.7) que en urbanas (0.9).

Se calcula que un 30% de las personas de sociedades occidentales tiene déficit de Vitamina B2.

Recientemente se ha reportado la importancia del consumo de riboflavina en la dieta dado que una ingesta elevada de ácidos grasos saturados y pobre en riboflavina se asocia a mayor riesgo de que el feto presente problemas cardíacos. La Vitamina B2 ayuda a mantener la salud visual en cuanto a prevenir la sequedad y la disminución de la secreción lacrimal. Parece que el consumo de Vitamina B2 disminuye el riesgo de sufrir de glaucoma. El suplemento prolongado de la Vitamina ayuda a mantener el vigor, es decir a retrasar los síntomas físicos y psíquicos del paso del tiempo. La riboflavina también participa en la producción de las células del sistema inmune por lo que se considera que la suplementación con Vitamina B2 ayuda a mantener elevadas las defensas. Por último cabe indicar que un consumo adecuado de riboflavina ayuda a cicatrizar mejor las heridas y las quemaduras.